Meditación – Sábado II de Tiempo Ordinario

Hoy es sábado II de Tiempo Ordinario.

La lectura de hoy es del evangelio de Marcos (Mc 3, 20-21):

En aquel tiempo, Jesús volvió a casa y se aglomeró otra vez la muchedumbre de modo que no podían comer. Se enteraron sus parientes y fueron a hacerse cargo de Él, pues decían: «Está fuera de sí».

Hoy asoma la sorpresa incluso entre los parientes de Cristo. Su ministerio causa asombro: por su novedad, por su autoridad y… porque exige adhesión a Él. Efectivamente, la nueva proximidad del «Reino» de la que habla Jesús, y cuya proclamación es lo distintivo de su mensaje, esa proximidad del todo nueva reside en Él mismo.

A través de su presencia y su actividad, Dios entra en la historia aquí y ahora de un modo totalmente nuevo, como Aquel que obra. Por eso ahora «se ha cumplido el tiempo»; por eso ahora es, de modo singular, el tiempo de la conversión y del arrepentimiento, pero también el tiempo del júbilo, pues, en Jesús, Dios viene a nuestro encuentro. En Él ahora es Dios quien actúa y reina; reina al modo divino, es decir, sin poder terrenal, a través del amor que llega «hasta el extremo», hasta la cruz.

—Jesús, acepto tu invitación a seguirte dejándolo todo. Porque Tú eres el «tesoro», y la comunión contigo es la «perla preciosa».

REDACCIÓN evangeli.net

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