LUNES DE LA IV SEMANA DEL TIEMPO ORDINARIO, feria
Misa de feria (verde)
Misal: Cualquier formulario permitido. Prefacio común.
Leccionario: Vol. III-impar
- Heb 11, 32-40. Por fe, conquistaron reinos. Dios tendrá preparado algo mejor a favor nuestro.
- Sal 30.Sed valientes de corazón los que esperáis en el Señor.
- Mc 5, 1-20.Espíritu inmundo, sal de este hombre
Antífona de entrada
Este es un verdadero mártir que derramó su sangre por el nombre de Cristo, no temió las amenazas de los jueces y así alcanzó el reino de los cielos.
Monición de entrada y acto penitencial
En su primer viaje a un país pagano, Jesús cura a un hombre poseído por el demonio. Los especialistas bíblicos aceptan generalmente el fundamento histórico de este extraño incidente, a saber, que Jesús se compadeció de un hombre enfermo y reveló su poder divino a los paganos. El resto sería un “midrash”, una especie de libre comentario, teológico-alegórico, al estilo rabínico, ya que los judíos tenían muy baja opinión de los paganos. Éstos eran esclavos de los demonios, vivían en lugares impuros de la muerte, como tumbas, y eran no mucho mejor que los cerdos. De todos modos, a Jesús las fronteras no le limitan y alcanza a esa gente más alejada, pero ellos no lo aceptan. Sólo el hombre curado muestra fe en Jesús.
Yo confieso…
Oración colecta
ESCUCHA, Señor,
a tu pueblo suplicante y,
por la protección de tu mártir san Blas:
concédenos gozar de paz en la vida presente
y encontrar ayuda para la eterna.
Por nuestro Señor Jesucristo.
Reflexión
La rara historia del endemoniado de Gerasa –más allá de algunos aspectos descriptivos, ornamentales o controvertidos– nos quiere dar a entender que el poder del mal es muy grande, pero que éste tiene que retroceder ante la fuerza salvadora de Jesús. Él es, además, quien es capaz de transformar a un furioso endemoniado en una especie de agradecido “misionero”. Paradójicamente y de manera insospechada, es a través del testimonio de ese hombre, liberado del poder del Maligno, como también a los paganos les viene anunciada la Buena Nueva de la salvación.
Oración de los fieles
Oremos confiadamente a Dios nuestro Padre, que por medio de Jesucristo libera a todos los encarcelados por el pecado y las fuerzas del mal.
1.- Por los muchos hombres y mujeres que en nuestro mundo, tantas veces cruel, están todavía sufriendo de discriminación, y son tratados como marginados, proscritos o en todas partes, indeseados, roguemos al Señor.
2.- Por todos nosotros, para que nunca percibamos los sentimientos de compasión como una debilidad o como algo que hay que ocultar, roguemos al Señor.
3.- En gratitud por los dones que hemos recibido del Señor y por la bondad que los hermanos tantas veces nos han mostrado, roguemos al Señor.
Escucha, Señor nuestras súplicas, y concédenos un espíritu de pobreza que nos haga libres y disponibles para que así lleguemos a ser, como los apóstoles, auténticos testigos del evangelio. Por Jesucristo, nuestro Señor.
Oración sobre las ofrendas
DIOS clementísimo,
derrama tu bendición sobre estos dones
y fortalécenos en la fe que confirmó san Blas
con el derramamiento de su sangre.
Por Jesucristo, nuestro Señor.
Antífona de comunión Cf. Jn 15, 1. 5
Yo soy la verdadera vid y vosotros los sarmientos, dice el Señor; el que permanece en mí y yo en él, ese da fruto abundante.
Oración después de la comunión
CONCEDE, Señor, a tus fieles,
alimentados con tu palabra y vivificados
con el sacramento del cielo,
beneficiarse de los dones de tu Hijo amado,
de tal manera que merezcamos participar siempre de su vida.
Él que vive y reina por los siglos de los siglos.