Liturgia – Domingo VII de Tiempo Ordinario

VII DOMINGO DEL TIEMPO ORDINARIO

Misa del domingo (verde)

Misal: Antífonas y oraciones propias. Gloria. Credo. Prefacio dominical.

Leccionario: Vol. I (A)

  • Lev 19, 1-2. 17-18. Amarás a tu prójimo como a ti mismo.
  • Sal 102.El Señor es compasivo y misericordioso.
  • 1Cor 3, 16-23. Todo es vuestro, vosotros de Cristo y Cristo de Dios.
  • Mt 5, 38-48.Amad a vuestros enemigos.

Antífona de entrada Sal 12, 6
Señor, yo confío en tu misericordia: mi alma gozará con tu salvación, y cantaré al Señor por el bien que me ha hecho.

Monición de entrada
Sólo la fuerza del amor es capaz de transformar el mundo. Esta es una verdad en la que los cristianos creemos firmemente; pero, por alguna ex­traña razón, nos cuesta ponerla en práctica.

Ser creyente no consiste en tener hábitos piadosos, una frecuente par­ticipación en cl culto o una escrupulosa vida moral: no por repetir más ja­culatorias ni oraciones de memoria se es más profundamente religioso.

Ser religioso es vivir la vida desde Dios, tener siempre en cuenta su vo­luntad, tener las actitudes que El espera de nosotros, trabajar por la paz, por la justicia, por la libertad de los hombres; en definitiva, ser religioso es tratar al prójimo no como a un cualquiera. sino como a un hermano queri­do por quien se está dispuesto a todo.

Acto penitencial
Comencemos, pues, la celebración de estos sagrados misterios reconociendo con humildad ante Dios y los demás nuestros pecados, pidiendo ser fieles al amor de Dios en nuestras vidas, cada día y para con todos.

• Por haber transformado tu alerta de amor en obligatoriedad de leves. Señor, ten piedad.
• Por nuestro conformismo y nuestra indolencia, por no llegar hasta cl final en el amor al hermano. Cristo, ten piedad.
• Por no decidirnos a aceptar el rostro de Dios Padre que Tú nos has re­velado. Señor, ten piedad.

Se dice Gloria.

Oración colecta
DIOS todopoderoso y eterno,
concede a tu pueblo
que la meditación asidua de tu doctrina
le enseñe a cumplir, de palabra y de obra,
lo que a Ti te complace.
Por nuestro Señor Jesucristo.

Se dice Credo.
Proclamemos ahora todos juntos nuestra fe, con la voluntad de vivirla siguiendo el camino que nos ha trazado Jesús.

Oración de los fieles
Con espíritu confiado, oremos por las necesidades de la Iglesia y del mundo entero. Oremos diciendo: ESCÚCHANOS, PADRE.

1.- Por las Iglesias de los países pobres. Que con la luz de Jesucristo sean semilla de esperanza entre sus conciudadanos y apoyo firme en la lucha por una vida digna y justa. OREMOS:

2.- Por los cristianos que son perseguidos por causa de su fe. Que sientan muy adentro la fuerza de Dios para seguir adelante, y la cercanía de todas las personas de buena voluntad. OREMOS:

3.- Por nuestras parroquias y comunidades. Que demos ante el mundo un buen testimonio de sencillez, de amor a los pobres, y de rechazo de toda soberbia. OREMOS:

4.- Por los gobernantes de las naciones, y de un modo especial por aquellos que más poder tienen. Que aprendan de Jesús los sentimientos de solidaridad y de generosidad como principal guía de su actuación. OREMOS:

5.- Por las personas que nos caen mal o que nos han ofendido o perjudicado. Que, como nos ha enseñado Jesús, sepamos amarlas y desear su bien. OREMOS:

6.- Por todos los que nos hemos reunido en esta Eucaristía. Que Dios nos haga sentir cada día más la alegría de ser cristianos. OREMOS:

Señor y Dios nuestro, escúchanos y sálvanos. Por Jesucristo, nuestro Señor.

Oración sobre las ofrendas
AL celebrar tus misterios con la debida reverenda,
te rogamos, Señor,
que los dones ofrecidos en reconocimiento de tu gloria
nos aprovechen para la salvación.
Por Jesucristo, nuestro Señor.

Antífona de comunión   Sal 9, 2-3
Proclamo todas tus maravillas, me alegro y exulto contigo, y toco en honor de tu nombre, oh Altísimo.

Oración después de la comunión
CONCÉDENOS, Dios todopoderoso,
alcanzar un día la salvación eterna,
cuyas primicias nos has entregado
en estos sacramentos.
Por Jesucristo nuestro Señor.